martes, 30 de marzo de 2010

A los tránsfugas

Un individuo que cambie repentinamente sus ideales y convicciones con la única intención de servirse con una cuchara sopera y ocupar un escaño para aprobar proyectos - que en ocasiones no leerá- en base a instrucciones y líneas partidarias, no merece que los ciudadanos y ciudadanas perdamos una mañana o tarde agrupados en fila india, para regalarle nuestro voto, tiempo y esperanzas de cambio.

La boleta electoral de las próximas elecciones congresuales y municipales a celebrarse en mayo en la República Dominicana estará copada de individuos oportunistas, clientelistas, ignorantes, y uno que otros intelectuales avivatos que buscan buena fortuna para asegurar el futuro de sus hijos y alguna querida. Seguir leyendo...

Es una vergüenza mayúscula y al mismo tiempo una pena enorme, saber que no llegan a diez, contados con los dedos de las manos, los candidatos que quieren ocupar un cargo público para servirle al país, para acabar con el desorden, para erradicar las desigualdades sociales.

Es el pueblo quien debe empoderarse, conocer sus deberes y derechos para poder exigirlos y obligarlos a cumplir, a aquellos que hacen las leyes y paradójicamente, las violan.

El fenómeno del transfuguismo político debe ser erradicado de una vez por toda y rechazado enérgicamente.

¿Por qué tiembla América?

Por Jenny Carolina Gónzález
No está ocurriendo nada anormal, que no corresponda al proceso regular del desarrollo del planeta y que revisando la historia se podrán encontrar la ocurrencia de eventos similares a los de este año. Seguir leyendo...


Las noticias de este año han estado marcadas por una palabra que se volvió recurrente en lo titulares: terremoto. En América Latina, Chile y Haití han sufrido movimientos telúricos de gran magnitud y Nicaragua, Argentina, Guatemala, Perú, Colombia, Ecuador, Venezuela, México y Costa Rica no se han escapado a los sacudones.

Para entender este fenómeno es importante comprender que vivimos sobre un sistema dinámico, en constante evolución y que los sismos son liberación súbita de energía acumulada, resultado de procesos que se iniciaron hace miles de millones de años.
En el caso de América su franja occidental está situada sobre el llamado Cinturón de Fuego del Pacífico, en donde desde la Patagonia en Argentina y hasta Alaska en Estados Unidos, hay diferentes placas que se reacomodan constantemente.
Ellas son Pacífica para el norte, Cocos para el centro y Nazca para el sur del continente. En todos los casos estas placas están empujando hacia el oriente, para meterse debajo de la superficie del continente. “Este no es un proceso fácil y va a encontrar una serie de reacciones como los sismos”, explicó Mónica Arcila, geóloga de la Red Sismológica Nacional de Colombia.
Elkin Salcedo, director del Observatorio Sismológico del Occidente Colombiano, aseguró que dicho proceso denominado como subducción es el causante de los movimientos en Chile, país que tiene el registro del terremoto más fuerte de la historia, de 9.5 grados y ocurrido en 1960, además de varios de los sismos en otras partes del continente.
Sumado a la actividad de estas placas, está la dinámica interna del continente cuyas fallas geológicas tienen su propia movilidad.

Ambos expertos coincidieron en señalar que no está ocurriendo nada anormal, que no corresponda al proceso regular del desarrollo del planeta y que revisando la historia se podrán encontrar la ocurrencia de eventos similares a los de este año.
“Lo que ha cambiado es la velocidad con que nos informamos”, afirmó la especialista Arcila, quien también aclaró que un terremoto no tiene que ver con otro, es decir que no es correcto pensar en un proceso en cadena, y que nada tiene que ver con el deterioro ambiental de la tierra.
“Hay sismicidad inducida por el hombre pero a nivel pequeño, como por ejemplo la extracción de petróleo, pero esto sólo altera los primeros kilómetros de la corteza terrestre”, dijo la geóloga.
La tierra siempre ha temblado y va a seguir temblando. Según Arcila cada día se registra un promedio de cuatro sismos con magnitud mayor a 0 o igual a 5 en el área de la zona del pacífico, pero por su profundidad son imperceptibles para el hombre.
Aparte de América Latina, otras zonas sísmicamente muy activas en el continente son los estados de Alaska y California en Estados Unidos.